Ante manifestaciones de rechazo en contra de la reforma a la Ley del ISSSTE, el magisterio sudcaliforniano analiza en estos momentos la posibilidad de unirse al paro nacional que está siendo convocado desde otras entidades.
Luego de protestas pacifistas y simbólicas que hicieron en el Congreso del Estado, representantes de la base trabajadora de la educación someten a consideración del profesorado el iniciar con suspensiones de clases hasta que las y los legisladores del Congreso de la Unión garanticen que no habrá afectaciones por esta iniciativa.
Argumentan que habrá cobros más altos para las y los trabajadores, asimismo, enfatizan su preocupación ya que, acusan, no hay claridad aún en el esquema de jubilaciones y pensiones.
A las y los diputados locales ya solicitaron que intervengan y garanticen la creación de mesas de diálogos con las y los legisladores federales.
También les advirtieron que no tolerarán que intenten desvirtuar el movimiento haciendo señalamientos de intenciones políticas contra la defensa de los derechos del magisterio.
Recalcando su rechazo a la dirigencia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) sección 3, que encabeza Elmuth Castillo Sandoval, se han organizado para realizar una marcha este viernes 28 de febrero en calles de la ciudad de La Paz.
Se espera que en los próximos días definan si los casi 16 mil trabajadores de la Educación se unirán al paro nacional en Baja California Sur.
