La directora del Centro de Energía Renovable y Calidad Ambiental (CERCA), Jaqueline Valenzuela, infiere que los apagones registrados durante julio y agosto pudieran ser un factor que esté incrementando el consumo de electricidad en los hogares y, por ende, se refleja en un aumento en el monto total de los recibos de la luz que llegaron en este bimestre.
En medio de la controversia por recibos de luz que han sido calificados como “abusivos” por parte de ciudadanos que señalan un incremento de hasta el 200% en comparación del mismo periodo del año pasado, la especialista explicó que se debe analizar el factor de los apagones.
“Podríamos inferir que sí, depende del caso particular y entonces decir: ´si yo el año pasado consumí tal cantidad de kilowatt-hora en el mismo mes, con los mismos aparatos y no ha cambiado prácticamente nada, habría de investigar a qué se debe esa diferencia en el consumo si es que la hay”, dijo.
“Otro indicador, si no hay una gran diferencia y el consumo es prácticamente el mismo al del año pasado, entonces sí hay una diferencia tarifaria que, como ya lo mencionamos, no debería de haberlo, porque es el juste inflacionario y no debería ser representativo”, comentó.
Considera que los cortes de energía programados son un nuevo factor que se está poniendo sobre la mesa para analizar el impacto que tienen en la última facturación del servicio ya que podrían ser el motivo de un mayor consumo de electricidad y no necesariamente un mayor uso en horas de aparatos.
“Atrás de nuestro recibo ahí viene el histórico en meses y viene el histórico, ahí es donde nosotros podemos comparar la diferencia en consumo respecto al año pasado. ¿Cuáles son las diferencias con el año pasado a este? Pues la cantidad de cortes en el suministro que hemos sufrido hasta la fecha”, subrayó.
“Si checamos el recibo en el mes de julio, donde ya se presentaron más fuertes y cuando cerremos agosto, recordemos que la facturación por lo menos en la parte doméstica es bimestral. Ahí necesitaríamos ir a nuestro recibo y compararlo por bimestre y ver si efectivamente hay una diferencia significativa en el consumo de kilowatt-hora que está registrando nuestro hogar a partir de estos diversos cortes en el suministro”, explicó.
También mencionó que en algunas ocasiones el estado de las instalaciones eléctricas no siempre es el mejor y es un rubro en el que no hay mucha atención si se compara con otros gastos prioritarios que absorbe la manutención de una vivienda.
En ese escenario pudiera entrar el factor de la falta de mantenimiento y del equipo en casa, sin embargo, lo que sí se puede analizar de manera puntual es el consumo de kilowatts.