Nos quedamos antes de concluir el año pasado que el Congreso del Estado aprobó una reforma a la Ley de Hacienda del Municipio de Los Cabos que incluía un incremento al Impuesto Sobre Adquisición de Bienes Inmuebles (ISABI); aumento además en el cobro del polémico cobro de Derecho de Saneamiento Ambiental a hoteles y servicios de hospedaje de plataformas y se incluía como sujetos obligados a los clientes de restaurantes, bares y hasta fonditas y taquerías, quienes pagarán 11 pesitos si consumen más de 400 pesos de una sentada; así como a quienes renten carros y embarcaciones recreativas.
Así, los diputados del PT, que presentaron la propuesta, apoyados por los diputados de Morena, Partido Verde y hasta el del PRI “metieron las manos” a los bolsillos del contribuyente local y de los visitantes turísticos para entregarle hasta mil millones de pesos extras anuales al gobierno de mayoría petista de Christian Agúndez Gómez, aliviando así su estrés por las paupérrimas condiciones financieras que dice, le heredó su antecesor, Oscar Leggs.
Ahora bien, para este año, además los diputados tuvieron la generosidad para con el gobierno cabeño de permitirles que para este 2025, lo que se recaude por concepto de ISABI se destine vía un “fideicomiso de saneamiento financiero” al pago de pasivos laborales del Ayuntamiento; es decir para pagar liquidaciones, finiquitos, vacaciones y otras obligaciones laborales para con trabajadores que se han dado de baja contratados en pasadas administraciones, principalmente en la de Oscar Leggs.
Esto quedó asentado en los artículos transitorios tercero y cuarto de la citada reforma, donde en resumen le dicen o condicionan al Ayuntamiento de Los Cabos que para que puedan usar los recursos del ISABI para pagar pasivos laborales, deben aprobar EN EL MES DE ENERO DE 2025 un Programa de Austeridad, Racionalidad y Disciplina del Gasto, es decir, bajarle a los gastos del gobierno.
Además, se les obliga a crear un ¨Fideicomiso de Saneamiento Financiero¨ para que la lana que caiga del ISABI se transfiera directamente a ese fideicomiso y ahí hacer los pagos correspondientes y tras concluir la vida del Fideicomiso, si queda dinero se regrese al Fideicomiso de Saneamiento Ambiental.
Por ello, en la pasada sesión de cabildo celebrada el pasado 7 de febrero, el Presidente Municipal presentó dos puntos de acuerdo, el primero para la creación del Fideicomiso de Saneamiento Financiero y otro para presentar el PROGRAMA DE AUSTERIDAD RACIAONALIDAD Y DISCIPLINA EN EL GASTO DEL XV AYUNTAMIENTO DE LOS CABOS Y LA XV ADMINISTRACIÓN MUNICIPAL.
De entrada, la reforma establece que la creación o presentación de ambas políticas debía ser en EL MES DE ENERO DE 2025, por lo que si nos ponemos exquisitos, el Gobierno Municipal ya está incumpliendo, por que presentaron y aprobaron el fideicomiso y el plan de austeridad en Febrero y no en enero, pero supongamos que la intención es lo que cuenta.
En el caso de la creación del Fideicomiso de Saneamiento Financiero no hay mucho que analizar, según lo presentado por el alcalde se apega a lo solicitado por el Congreso del Estado para darle transparencia, incluso se asentó que el Fideicomiso presentará de manera trimestral un informe al Congreso sobre su operación.
Lo que sí, nada más queda para el discurso, es lo del “PROGRAMA DE AUSTERIDAD RACIONALIDAD Y DISCIPLINA EN EL GASTO”.
En el texto del dictamen presentado ante síndica y regidores por el alcalde Christian Agúndez se lee:
“Es claro compañeros regidores y Sindico (sic) Municipal, que se considera que debemos ser razonables y congruentes con lo que decimos y hacemos… es momento de ser solidarios con la sociedad cabeña que tanto nos ha dado”… (¿Cómo no agradecer mil millones de pesos extra de los bolsillos del ciudadano y el turista).
“…por lo que si la sociedad es responsable de cumplir con sus obligaciones como ciudadanos, nosotros debemos de corresponder a esa respuesta dada por ellos al cumplir con el pago de sus impuestos, ¿y como lo podemos hacer?, pues muy sencillo, siendo responsables en el gasto…”.
¿Apoco no se lee muy bonito?
La cosa es que en todo el documento no se dice de cuanto será el ahorro que prevé el Gobierno Municipal, ni en cuanto tiempo. Puras generalidades y buenos deseos en la compra de insumos, renta de servicios e inmuebles, etc.
Osea en lo de los impuestos si dice como y cuanto se le cobrará al ciudadano y visitante, pero para los servidores públicos, queda en buenas intenciones.
¡Vaya! Ni siquiera dice cuanto y cuando se reducirá la nómina que se supone dio pie al incremento de los impuestos.
Una tomada de pelo.
Para cumplir con el requisito pues.
La verdad es que desde que me acuerdo, con Antonio Agúndez, cada nueva administración inicia anunciando “GRANDES ACCIONES DE AUSTERIDAD” porque sus antecesores les dejaron un “cochinero” financiero.
Pero todos terminan con sus camionetotas del año, nóminas abultadas con contrataciones absurdas en otros estados, decenas de asesores y compra de bienes e insumos con precios inflados.
¿Y el pueblo?
Como empezó el trienio, con calles jodidas, sin agua, sin alumbrado y sin recolección de basura”
Ojalá los mil millones de pesos sacados de los bolsillos de ciudadanos y turistas esta vez sean la diferencia.
