El 30 de agosto, familiares de víctimas de desaparición salieron a marchar al malecón de la ciudad de La Paz para recalcar que Baja California Sur es un estado en donde se vive sin acceso a la justicia y a la verdad.
“Gobernador indolente, desaparecen a la gente en la cara de tu gente”, se leía en los mensajes que llevaron familiares a la protesta.
Y es que el 30 de agosto se conmemoró el Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, por lo que, como cada año, familiares salieron a manifestar sus inconformidades y poner el dedo en la llaga de la ineficiencia e indolencia institucional que enfrentan todos los días.
La situación sigue siendo la misma que narran todos los años: las carpetas de investigación simplemente siguen en blanco, no hay avances de ningún tipo.
Es como si denunciar la desaparición de un ser querido fuera un mero trámite ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), comentan las personas, ya que nunca hay explicaciones por parte de las autoridades de cómo se mueven las investigaciones, sobre avances o explicaciones que ayuden a dar con el paradero de las víctimas.
“Un día que no debería existir, pero existe. Nuestros brazos están cansados, están cansados de tanto buscar; nuestros pies están cansados de tanto caminar, pero la fe y el acto de amor es incondicional”, expresaron.
“La búsqueda incansable de volverte a ver y de tenerte de regreso en casa es más grande, porque vivos se los llevaron y vivos los queremos. Vivimos en un estado sin verdad y sin justicia, lo único que queremos es volver a tenerte en casa”, compartieron.
De acuerdo con el Registro Nacional, de enero de 2020 a la fecha 538 personas han desaparecido o no han sido localizadas en Baja California Sur, 105 de estos reportes se registraron en lo que va del 2025.
En el histórico, el Registro Nacional reporta mil 103 personas desaparecidas y no localizadas en la Media Península.
Son los familiares de las víctimas de desaparición quienes encabezan los esfuerzos para localizarlos, con trabajos de campo, investigaciones particulares; con pala en mano y ropas que cubran la piel del sol, salen a excavar para encontrar cualquier indicio que los lleve a sus seres queridos.