Tras darse a conocer la situación con el nuevo plan de manejo de la Isla Espíritu Santo, con el que se pretende prohibir la pesca en la ANP, José Flores, líder de la Federación de Cooperativas Pesqueras (Fedecoop) en zona centro de Baja California Sur, expuso que si se aprueba este instrumento casi 170 pescadores de La Paz se verían afectados.
No sólo sus familias, sino también la cadena productiva de la Capital, ya que estos pescadores ribereños se encargan de distribuir pescado fresco a restaurantes y negocios paceños.
“Veo muy sospechoso y lamentable que esté pasando eso en un área tan importante para los paceños, que tradicionalmente van y pescan y que es una muy buena fuente de ingresos para nuestros pescadores, tanto ribereños como deportivos; más aún que de ahí se trae alimento sano y bueno a La Paz”, señaló.
Sin duda, recalcó, esto impacta desde las empresas que se dedican a las artes de pesca, hasta la derrama de la pesca ribereña y deportiva.
“Limitar eso afectaría tanto a las casas comerciales, a los restaurantes, a los prestadores de servicios turísticos”, comentó.
Cabe recordar que la comunidad pudo constatar a través de un borrador que consiguieron en la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT), que las autoridades pretenden prohibir la pesca ribereña, deportiva y artesanal en Espíritu Santo.
El líder de la Fedecoop constató que la ANP es una ruta clave para productores, por lo que prohibir la pesca es injusto desde la perspectiva de los usos y costumbres de la sociedad paceña.
El jurel, lenguado, cochito, cardenal, pargo y la cabrilla sardinera son las especies que más se capturan en esta zona para la población de La Paz.
“Ahorita vemos que la peor amenaza ya no son los barcos, ahora la amenaza para los pescadores ribereños es la misma Conanp”, enfatizó.
En este escenario, la comunidad comenta que las autoridades les aseguran que el borrador no será el documento que se someta a consulta pública, sin embargo, existe incertidumbre y desconfianza por el proceso opaco que han enfrentado, donde se les ha excluido del proceso de elaboración.
“El tema del nuevo plan de manejo nació a raíz de que el Consejo de la Isla se tomó el acuerdo de hacer una modificación, pero no pensábamos que fuera tan radical esa modificación tomando en cuenta que la Isla ha tenido por segunda ocasión una certificación de una organización internacional que se encarga de evaluar el desempeño de las Áreas Naturales Protegidas”, dijo.
