La Paz, Baja California Sur.– El gobernador Víctor Manuel Castro Cosío formalizó ante el Congreso del Estado una iniciativa con proyecto de decreto para modificar el artículo 36 de la Ley de Hacienda de Baja California Sur y elevar el Impuesto Sobre Nóminas (ISN) del 2.5% al 3%, lo que representa un incremento real del 20% para empleadores sudcalifornianos.
La propuesta, entregada el 26 de noviembre de 2025, establece que el ISN —que actualmente se liquida a razón del 2.5% desde 2006— deberá ajustarse a una tasa del 3% a partir del 1 de enero de 2026, fecha señalada en los artículos transitorios del propio decreto.
Ayer en el pleno del Congreso del Estado se dio primera lectura al documento y se turnó a la comisión correspondiente para iniciar el proceso legislativo.
LO QUE HOYBCS ADELANTÓ: EL AUMENTO YA VENÍA EN LA LEY DE INGRESOS 2026
Apenas días atrás, HOYBCS dio a conocer que el gobernador había enviado al Congreso la Ley de Ingresos 2026, en la cual ya se proyectaba un aumento sustancial en la recaudación del ISN, anticipando así la intención del Ejecutivo de elevar la tasa vigente.
Con esta nueva iniciativa queda confirmada la ruta fiscal del Gobierno del Estado para el próximo año.
ARGUMENTOS DEL GOBIERNO: BCS ESTÁ ENTRE LAS TASAS MÁS BAJAS DEL PAÍS
En la exposición de motivos, Castro Cosío señala que:
Baja California Sur se mantiene entre los estados con la tasa más baja del país (2.5%).
La mayoría de entidades federativas ya aplican un impuesto del 3%.
El incremento fortalecería la capacidad estatal para financiar servicios públicos y obras de infraestructura social, tanto a nivel estatal como municipal.
El documento sostiene que el ISN es una “fuente significativa de ingreso propio” y que su aumento permitirá “incrementar ingresos a la Entidad para beneficio de la ciudadanía”.
LA REFORMA ENTRARÍA EN VIGOR EL 1 DE ENERO DE 2026
El decreto enviado al Congreso marca claramente que el aumento aplicará desde el primer día de 2026, siempre y cuando sea aprobado y publicado en el Boletín Oficial del Gobierno del Estado. También instruye la armonización administrativa necesaria en los municipios y dependencias estatales.
IMPACTO PARA EL SECTOR PRODUCTIVO
Un incremento del 2.5% al 3% representa un 20% de aumento en el costo fiscal directo para las empresas por cada peso pagado en remuneraciones, uno de los señalamientos que cámaras empresariales han advertido como sensibles en contextos inflacionarios y de desaceleración económica.
La discusión legislativa iniciará en los próximos días, en medio de un creciente debate sobre la presión tributaria a empleadores y los retos presupuestales del estado.

