La directora del Centro de Energía Renovable y Calidad Ambiental (CERCA), Jaqueline Valenzuela, expuso que la demanda de electricidad en Baja California Sur está creciendo un 15% por año, más ahora que la pandemia provocada por el virus SARS-CoV-2 ha terminado y que el desarrollo económico empieza recuperar su ritmo de incremento.
En medio de otra crisis energética en Baja California Sur, con apagones constantes en distintas colonias, explicó que la Comisión Federal de Electricidad contempla 675 MW de generación para satisfacer el pico de demanda más alto, que pronostican que sea de 648 MW.
El 22 de julio de 2022 se registró una nueva cifra histórica en la demanda de energía, día en el que llegó a los 595 MW.
En lo que va del verano de 2023, los datos de la CFE indican que la demanda en la entidad ya llegó a los 626 MW y todavía queda la parte más complicada de la estación.
La directora detalló que la CFE tiene una capacidad instalada de generación que llega casi a los 1000 MW, sin embargo, esto no quiere decir que esté lista para operar en los momentos en los que se presenta algún pico en el consumo.
“La capacidad instalada que creció en la CFE, estaríamos hablando de 909 de energía convencional fósil y 80 MW más de energía que le llaman ellos intermitentes, es decir la centrales de energías renovables”, expuso.
“Están instaladas las máquinas, pero no tenemos la certeza que todas estén en condiciones de operar, pero no quiere decir que sea generación real o que todas estén listas para operar. Creo que no todas estuviesen listas para operar, porque el pronóstico de la CFE para responder con estos 670 MW no sería tan conservador”, precisó.
Actualmente ya hay registros de decenas de apagones en comunidades de los municipios de La Paz, Loreto y Los Cabos, no obstante, la asociación prevé que esto también puede deberse a falta de mantenimiento en el sistema de suministro de energía.