El excandidato de Juntos por BCS, Rigoberto Mares, informó que ha impugnado ante la Sala Regional Guadalajara la sentencia por violencia política de género impuesta por el Tribunal Estatal Electoral de Baja California Sur (TEEBCS).
Rigo Mares subrayó que no está de acuerdo con la resolución del TEEBCS, acusando que las determinaciones del pleno atienden más a criterios políticos que a razones verdaderamente jurídicas.
“Por supuesto que no estoy de acuerdo con la resolución del Tribunal Estatal y ya impugnamos esta resolución ante la Sala Regional. Tengo mucha claridad, mucha confianza en que la Sala Regional nuevamente va a enderezarle la plana al Tribunal Estatal Electoral”, declaró.
“No es la primera vez que lo hace porque este Tribunal local desafortunadamente se ha caracterizado en muchas de sus resoluciones, insisto, por atender a criterios políticos y por tratar de quedar a bien con el gobierno en turno y no por atender temas estrictamente jurídicos”, reiteró.
Como ejemplo, recordó que la situación que se dio tres años cuando el TEEBCS les quitó el curul por el XV y V Distrito a él y a Armando Martínez, para entregárselo a las entonces candidatas de Morena y PT, Fernanda Villarreal y Karina Olivas.
La Sala Regional Guadalajara dio revés a la resolución del TEEBCS y la Sala Superior reiteró esta decisión, regresando las diputaciones los panistas, Rigo Mares y Armando Martínez.
“En un despropósito nos quitan la diputación, fue algo que no tenía ningún sentido, ningún elemento simplemente para quedar bien con quienes estaban entrando en ese momento al poder”, recalcó.
Mares Aguilar insiste en que no cometió violencia política de género en contra de la alcaldesa, Milena Quiroga Romero, por señalar que su candidatura a la reelección en el municipio de La Paz fue una imposición del gobernador del estado, Víctor Castro Cosío.
Enfatizó que quienes no resultaron electos en el proceso interno de Morena señalaron la intromisión del mandatario, lo que quedó constatado en vídeos y en otras evidencias.
“Posteriormente, cuando se hicieron las designaciones, le pedían al gobernador que sacara las manos del proceso, hablaban clara y evidentemente de imposiciones y eso fue algo que en su momento ellos mismos denunciaron”, dijo.
En este escenario, argumentó que en el proceso interno de Morena los elegidos, independientemente del género, fueron productos de imposiciones y lo que se conoce en la cultura política mexicana como el dedazo.
“Yo en ningún momento, y lo digo categóricamente, ejercí violencia de género contra nadie. Las expresiones que hice con respecto al proceso interno de Morena, fueron expresiones que en su momento hicieron los propios participantes de ese proceso”, sostuvo.
“Al final esa es la expresión que nosotros hicimos y la hicimos claramente en ese sentido sin un tema de si había sido alguien electo por ser hombre o ser mujer, sino por una decisión e intromisión”, finalizó.