Finalmente, este domingo concluyeron las campañas de los candidatos a la Presidencia Municipal de Los Cabos.
Si la definición en torno a quien fue el vencedor en la campaña la basáramos en las fotos de los eventos realizados ayer por los dos candidatos punteros, Ernesto Ibarra y Christian Agúndez, tendríamos un empate.
Nada para nadie.
Ambos eventos lograron una gran convocatoria que sirvió para inundar sus redes de publicaciones triunfalistas.
Sin embargo, debemos analizar todo el proceso de precampañas y campañas para poder dar mayor certeza a quien fue el ganador de la campaña.
1.-Proceso Interno.
Ernesto Ibarra Montoya prácticamente no tuvo rivales para hacerse con la candidatura común del PAN, PRI y PRD. Su principal competidor fue el ex presidente del PAN de Los Cabos, ex regidor y empresario, Celestino Atienzo, quien obtuvo la primer regiduría de la planilla del Ayuntamiento de Los Cabos y se logró un ánimo de unidad alrededor de la candidatura del médico de profesión.
En contraste la definición candidatura de Christian Agúndez estuvo marcada por la sospecha de manipulación de encuestas (con audios revelados de por medio) que arrastró hasta un día antes del cierre de campaña.
El cuestionado proceso provocó una ruptura irreconciliable entre el candidato y el alcalde en funciones, Oscar Leggs, quien durante toda la campaña agotó un proceso de impugnación contra el hijo del ex gobernador.
Pero además hubo otras fisuras, ya que otros aspirantes dentro de la 4T cabeña que también denunciaron irregularidades, definieron su participación en otros partidos, principalmente Fuerza x México, como la regidora, Lucía Sánchez y su otrora aliado y presunto operador de la manipulación de encuestas, Catarino Flores.
Estos hechos provocaron que la candidatura de Agúndez Gómez se mantuviera en una especie de limbo la mayor parte de la campaña, al grado que personas fuera del llamado “circulo rojo”, no tenían claridad quién era el candidato de Morena y la 4T.
2.- Imagen del candidato.
Con una tercera campaña a la Presidencia Municipal a cuestas, desde el arranque de las campañas Ibarra Montoya demostró su experiencia política, haciendo sumas de ex morenistas y de figuras tan importantes como Don Angel Salvador Ceseña, realizando encuentros con distintos sectores sociales y empresariales, acudiendo al único debate que se realizó entre candidatos. Con los medios de comunicación tuvo una buena relación, por lo que en su mayoría, se publicaron ampliamente sus boletines de prensa. Sus eventos fueron nutridos y con ambiente festivo y de unidad de la oposición.
Por su parte a Christian Agúndez se le percibió como un candidato débil. Por estrategia, imposición o decisión propia no acudió al único debate que se realizó y por su desinterés, no se realizó el debate oficial del IEE. Fue selectivo de los sectores sociales y empresariales con los que se reunió al grado de no asistir al foro ciudadano organizado por Coparmex. Y lo que es peor, cuando acudía a un foro, los asistentes lo calificaron de soberbio y con una visible falta de conocimiento y capacidad para resolver los temas del municipio.
3.-Discurso y propuestas.
En este apartado la verdad es que ninguna de las campañas o candidatos aportó algo brillante, novedoso y que emocionara a las masas. Se impuso la demagogia y el discurso fácil. Se centraron ambos en el tema del agua y la movilidad, sin presentar claras propuestas para la solución. Se trató además de campañas grises donde ambos candidatos renunciaron al contraste de ideas o capacidades.
Con estos argumentos podemos decir que Ernesto Ibarra ganó la campaña del proceso electoral 2023-2024 para la Presidencia Municipal de Los Cabos, al lograr una campaña unida y tener mejor imagen en lo público que el candidato oficialista.
Pero viene el Día D el 2 de junio.
Es decir, viene el día de la elección y es donde la campaña oficialista con los cierres de campaña demostró que tienen la máquina bien aceitada.
A pesar de las debilidades de su candidato, ayer el denominado “Grupo Los Cabos”, mostró su capacidad de movilización y en el mensaje y descontón político, lo hicieron en el bastión de Oscar Leggs, ocupando la plaza León Cota Collins de Cabo San Lucas, plaza además más cómoda en percepción del propio candidato opositor, Ibarra Montoya.
Es decir, no importa la desastrosa campaña, la maquinaria oficialista, impulsada por el gobernador Víctor Castro y su líder político, Narciso Agúndez, está en marcha.
Y es que durante la campaña se dio “el regreso a casa”, al Grupo Los Cabos de operadores políticos como Ariel Castro y Jorge Sánchez (en algún momento incondicionales de Leggs), que apuntalan la operación política de Agúndez en San José del Cabo y Cabo San Lucas para el día de la elección.
En los hechos la mayoría de los personajes políticos que han operado los triunfos en las urnas de las presidencias municipales de los últimos 25 años, sin importar partido, se encontrarían en este 2024 en las filas del agundismo.
Aunque en ese periodo se ha dado alternancia en el poder municipales, del PRD al PAN y del PAN a Morena, en los hechos los operadores políticos saltando de partido en partido, prácticamente son los mismos.
De los candidatos, uno ganó la campaña; otro demostró capacidad de movilización para lo que viene.
En Los Cabos, la moneda está en el aire.