Desde que asumió su rol como líder moral y político de Morena en el estado allá por el 2017, Víctor Castro hizo una alianza con el Grupo Los Cabos de su entonces jefe político, Narciso Agúndez.
Así, desde la campaña 2018 y posteriormente las campañas 2021 y 2024, Castro Cosío descansó en el agundizmo la operación político electoral del proyecto de cuarta transformación en Los Cabos.
En la elección 2018 pretendió la alianza Morena-PT con Ernesto Ibarra que en ese momento era candidato del agundizmo; y al no lograrse, nunca le dio el apoyo a la candidata de Morena, Armida Castro.
En su elección para Gobernador de 2021, el mismo Castro ha reconocido públicamente que sin el voto del PT, principalmente en Los Cabos no habría logrado el triunfo. De hecho su destape para Gobernador sucedió en el rancho del ex gobernador Agúndez.
Y para 2024, impulsó en la carrera interna de la alianza Morena -PT al hoy alcalde petista, Christian Agúndez.
Por ello, a pesar de que Morena gobernó en Los Cabos 6 años, no se fortalecieron los cuadros morenistas por que además, las candidaturas de diputaciones locales y regidurías también se entregaron a cuadros relacionados con el agundizmo.
Es decir, en el tiempo de poder de Víctor Castro no se fortalecieron nuevos cuadros morenistas en Los Cabos y los pocos que había fueron relegados a posiciones secundarias.
No se formó dentro de Morena un perfil competitivo para la alcaldía de Los Cabos.
Por eso ahora que viene el 27 y ante el distanciamiento y eventual ruptura con el PT, Víctor Castro tiene una bronca por que no tiene hasta el momento en sus filas un perfil sólido para competir Los Cabos y que le ayude a Milena Quiroga a posicionarse.
Así, ha tenido que echar mano de donde sea para formar un proyecto en Los Cabos, al cuarto para las doce.
En las últimas semanas, me han comentado que en mesas donde se habla de política con empresarios y líderes de opinión, varios personajes han expuesto que ya tienen la bendición del Gobernador para ser candidatos o candidatas de Morena.
Se habla que en esa situación se encuentran la ex panista y senadora suplente, Eda Palacios; el ex representante del Gobernador en Los Cabos y hoy director municipal de desarrollo social, Carlos Castro; el empresario y operador político de Milena, Alejandro Rojas y la croquista y actual diputada local, Cristina Contreras.
E incluso ibarristas me comentan que la inclusión del doctor a las finas del milanismo, también tiene la venia de Víctor Castro, aunque públicamente le haya “hecho fuchi”.
Y otra vez los morenistas en el rincón. No me han comentado de uno solo que “tenga la bendición del gober”.
Con tantos aspirantes “bendecidos”, queda claro que no hay definición por nadie.