La Paz, BCS.– Conmovidos por las graves afectaciones que dejaron las lluvias e inundaciones en diversos estados del país, los sudcalifornianos respondieron con el corazón: 200 toneladas de ayuda humanitaria partieron este lunes rumbo a Veracruz, Querétaro, Puebla, Hidalgo y San Luis Potosí, cargadas de alimentos, agua, artículos de higiene, ropa y esperanza.
El gobernador Víctor Manuel Castro Cosío, acompañado por la presidenta del Sistema Estatal DIF, Patricia López Navarro, encabezó el banderazo de salida de los primeros siete vehículos con los donativos recolectados en el Centro de Acopio “Solidaridad”, donde durante varios días familias, empresas y dependencias de los cinco municipios de Baja California Sur unieron esfuerzos para apoyar a quienes hoy atraviesan momentos difíciles.
“Baja California Sur y su gente muestran una vez más que están del lado de quienes más lo necesitan”, expresó el mandatario estatal, destacando la generosidad de la población y la colaboración de instituciones civiles y militares.
La Secretaría de Marina Armada de México se encargará del traslado de los víveres desde el puerto de Pichilingue a bordo del buque “Isla Tiburón”, garantizando que la ayuda llegue a tiempo y de forma organizada a las comunidades más afectadas.
Castro Cosío subrayó que este esfuerzo representa la unión de toda la sociedad sudcaliforniana, desde los gobiernos municipales y el sector empresarial hasta las familias que aportaron un kilo de arroz, una cobija o una caja de agua.
“Detrás de cada donativo hay un rostro, una historia y un gesto de solidaridad. Este envío es un reflejo de lo que somos como pueblo: solidarios, empáticos y dispuestos a tender la mano cuando alguien lo necesita”, agregó el gobernador.
Entre aplausos y emoción, los camiones partieron con un mensaje claro: en Baja California Sur, la ayuda viaja en el corazón de su gente.