El mismo gobierno lo sabe.
El mismo gobierno lo advierte:
“Residente endémico”.
Se trata del Güírigo.
Y el letrero que alude a tal ave se encuentra igual que su hábitat: sucio. Abandonado.
El estero de San José del Cabo, a metros del palacio municipal, es una vergüenza ambiental.
–¿Cómo es posible que se aluda con letreros a una especie endémica con su hábitat destruido?
En el letrero apenas si se puede leer la referencia: Reserva Ecológica Estatal.
Está visto que no es causa de rubor o vergüenza oficial.
¿Qué se entiende por endémico? La Real Academia Española en cuanto la biología, cita: “Propio y exclusivo de determinadas localidades o regiones”.
Es decir, el Güírigo es hijo de Los Cabos.
A qué hijo tan indefenso se le trata tan de manera miserable.
A quiénes llegan a poner un pie en el estero de San José del Cabo se les sale que el Güírigo es una especie de ave endémica. Uno mira el letrero y mira al derredor, el hogar del ave endémica destruido.
Qué venga el Congreso sudcaliforniano a dar cuenta de los 200 millones de pesos que captarán las arcas municipales de Los Cabos en el 2024 por el cobro que se aplica de huéspedes de centros de hospedaje –hoteles– por el derecho de Saneamiento Ambiental y como ¡maldita sea la cosa! se encuentra el estero de San José del Cabo.
¿Cómo es posible que se ponga un letrero que aluda al Güírigo como ave endémica con un pago de visitantes por Saneamiento Ambiental y se tenga por saneamiento ambiental una completa porquería?
El nombre científico del Güírigo, Toxostoma cinereum. También se le conoce como el Cuitlacoche Ceniciento. Y por su condición de endémico por igual tiene el agregado “peninsular”: Cuitlacoche Peninsular.
Que agravio ambiental, social. Aludir que el Güírigo es una especie endémica y alrededor lo que se ve es la destrucción de su hábitat.
Con esos 200 millones de pesos que nos e haría con el estero josefino. E impulsar las plantas de tratamiento de aguas residuales que no manejo el desarrollo urbano. Se habla de calles a pavimentar o vehículos recolectores de basura. Pero, entonces, por qué diablos si había necesidad de recursos municipales, se permitió el incremento de ¡un mil 500 plazas municipales! En este trienio 2021-2014.
La contradicción sacude cualquier alusión que se quisiera por el ingreso y distribución del pago del derecho por Saneamiento Ambiental.
Podrán decir que los camiones recolectores de basura es cuestión de Saneamiento Ambiental. Pues, que se diga entonces en qué y cómo se gastaron mas de 4 mil millones de pesos en el 2022 –y lo que se haya acumulado en el 2023 y 2024–. Silencio.
No cabe la justificación. Queda el hecho.
Y entre los hechos, la destrucción de su hogar a un hijo de Los Cabos.
El Güírigo.
Ave endémica.
Que terrible cinismo con todo y letrero.
