A sietes meses desde que se inauguró la nueva clínica del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en Cabo San Lucas, la institución de salud ya presenta problemáticas en cuanto al ambiente laboral y la falta de operación de áreas y desabasto de medicamentos.
Este miércoles un grupo de trabajadores acuerpados por el Sindicato Nacional de Trabajadores del ISSSTE se manifestaron afuera de la clínica ubicada en Portales para denunciar que han interpuesto 27 quejas en el Comité de Ética respecto a un presunto abuso de autoridad y maltrato laboral por parte del director, Miguel A. Graciano Mendoza, y la subdirectora, Iris Valerio Robles.
Además de que señalaron que hay un ambiente hostil dentro del hospital, generado por amenazas y falta de respeto a los trabajadores. Inoperancia de los subdelegados médico y administrativo del ISSSTE en Baja California Sur. Falta de cumplimiento de las condiciones generales de trabajo que afectan a los empleados del ISSSTE y desabasto de medicamentos y materiales esenciales, afectando la atención a los derechohabientes.
El secretario general de la sección 9 del ISSSTE, Sergio Cota Cárdenas, señaló que la base trabajadora exige ser escuchada respecto a sus demandas, sobre todo por el hostigamiento laboral que se está viviendo y argumentó que ya se intentó despedir a una doctora por no otorgar un documento a un paciente, mismo con el que la propia institución no contaba.
“Todas las quejas interpuestas por los trabajadores están vigentes, no hemos tenido respuesta, tan es así que lo expresaron los trabajadores y próximamente irán otros a presentarse y hacer una narrativa. No hay respuestas, por eso la desesperación de tomar acciones para ser escuchados y que la autoridad se entere de la situación real que se vive en la clínica hospital que funciona al 20 por ciento”.
Los trabajadores destacaron que las deficiencias han propiciado que no se brinde una atención digna a los pacientes ni un ambiente laboral adecuado a los trabajadores, quienes pasan hasta 10 horas esperando brindar atención médica, derivado de que hay áreas como el puesto de sangrado y laboratorio que no cuentan aún con autorizaciones.