El jefe de la Oficina del Ejecutivo, Omar Castro, narró cómo se vivió el accidente aéreo en el que viajaba con el gobernador del estado, Víctor Castro Cosío, la noche del miércoles 19 de junio, que se suscitó en el Aeropuerto Internacional de La Paz.
Expuso que previo al incidente, estuvieron de gira por comunidades del municipio de Mulegé, como San José de Magdalena y San Isidro, donde escucharon a rancheros y gozaron de la hospitalidad, degustando comida sudcaliforniana.
De ahí partieron a Loreto, “en el límite del cierre del aeropuerto para abordar el Cessna de cuatro plazas, con destino a La Paz”, donde los esperaba un viaje de 45 minutos
“En la aproximación a la pista, todo iba muy bien, pero al tocar tierra con el tren de aterrizaje trasero, ahí empezó la pesadilla”, escribió el funcionario estatal.
“El tren de nariz falló, y entre brincos cada vez más altos y campanazos de punta a cola, el piloto decidió reducir a cero la potencia para que finalmente la nave clavara el pico sobre la pista, deslizándonos o derrapando por un largo trecho hasta que por fin se detuvo”, contó.
En ese momento, narra, se desabrocharon los cinturones, buscando las manijas de las puertas para abandonar la avioneta para escapar de un eventual incendio, siniestro que afortunadamente no se registró.
“El Capitán, Víctor y el que escribe, resultamos ilesos, gracias a la pericia del piloto, quien evitó el despiste o la volcadura de la nave”, reconoció.
Omar Castro escribió que, luego de la revisión a cargo de paramédicos, mientras la noticia corría por todo el estado.
“Regresamos a nuestros hogares y todo quedó en el anecdotario. Mi hermano, fallecido en el 2008, tendrá que seguir esperando el encuentro en el más allá, pues aquí seguimos ´vivitos y coleando´”, finalizó.