La comunidad de Todos Santos ha lanzado un llamado urgente a la sociedad sudcaliforniana para sumarse a la defensa del oasis que da origen, identidad y vida a su pueblo, ya que el 3 de mayo las y los habitantes se unieron para manifestarse públicamente en la plaza central del poblado para exigir el alto inmediato a la construcción ilegal del proyecto Pamoral, ubicado en el área del palmar.
Denuncian que el proyecto Palmoral carece de permisos oficiales y contraviene el Plan de Desarrollo Urbano (PDU), que prohíbe expresamente cualquier tipo de construcción en esa zona debido a su alto valor ecológico, hidrológico, histórico y cultural.
A pesar de ello, la obra avanza día con día, destruyendo flora, hábitats esenciales y suelos fértiles, generando impactos irreversibles en un ecosistema vital para el equilibrio ambiental y la vida comunitaria.
La comunidad organizada presentó una demanda popular ante autoridades municipales y la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), alertando sobre la ilegalidad y los riesgos del proyecto Palmoral.
Sin embargo, denunciando que las autoridades han actuado de forma tardía, deficiente y permisiva, permitiendo que la construcción continúe en total impunidad.
Es por ello que las y los habitantes de Todos Santos exigen la suspensión Inmediata y Clausura Definitiva del Proyecto Palmoral, así como la reparación total del daño ambiental causado a todo el palmar.
En la lista de peticiones agregaron la demarcación de la Zona Federal y su designación como área de espacio público y protegido, incluyendo una investigación y sanción a los responsables de permitir, encubrir o facilitar esta obra que califican como ilegal.
Además demanda la revocación del Plan de Desarrollo Urbano que ha impulsado el Instituto Municipal de Planeación (Implan), para este punto y los demás la población ha reunido centenares de firmas ciudadanas para exigir la negación del permiso al megaproyecto “Cabo Santos”, que amenaza con colapsar el sistema de agua potable, drenaje y servicios del pueblo.
La manifestación busca visibilizar lo que se pretende esconder, exigir respuestas claras, acción inmediata y respeto al territorio, esto en un escenario en el que la comunidad de Todos Santos ha estado luchando durante meses para proteger su oasis y su patrimonio natural y cultural.