En la primera semana de junio del 2024, el Congreso del Estado aprobó reformas y adiciones para reconocer la denominada “licencia menstrual”, pero este permiso sólo será para trabajadoras de instituciones públicas de Baja California Sur, dejando a mujeres que laboran en otros sectores sin la posibilidad de acceder a él.
Integrantes de la colectiva feminista “Hermanas Sanluqueñas” aplaudieron que estas iniciativas lleguen a Baja California Sur, sin embargo, recriminaron el hecho de que el acceso a este derecho no sea para todas las mujeres del Estado.
“Se nos ha mirado no sólo desde la perspectiva de esta ley, sino de muchas otras, como ciudadanas de segunda”.
“Valdría la pena revisar cual es el trabajo de los legisladores y para quién están legislando, sí para sí mismos o para la ciudadanía”, expusieron.
Las feministas recordaron que las y los funcionarios no sólo tienen sueldos más altos y más prestaciones que la ciudadanía promedio, sino que ahora también tienen acceso a más derechos que la población.
Ejemplifican la aprobación de esta reforma con la “licencia de paternidad”, a la cual también sólo tienen acceso los funcionarios.
“Están viendo únicamente para sí mismos, legislando para sí mismos y dejan en segundo plano a la ciudadanía, en este caso a los padres. Si queremos cambiar la perspectiva de la sociedad respecto a los roles de género y la maternidad o paternidad, no tiene sentido que esta sea una prestación para funcionarios públicos”, agregaron.
Esta reforma (licencia menstrual) a la Ley de los Trabajadores al Servicio de los Poderes del Estado y Municipios de Baja California Sur, permite a las personas menstruantes un permiso de dos días al mes con goce de sueldo cuando sean diagnosticadas con dismenorrea en grado incapacitante o endometriosis.
