Me lastimo con la pregunta.
Lastima la pregunta.
Sacude a la conciencia:
Ha pasado ya un mes de las elecciones del 2 de junio del 2024.
Hubo votos.
Lacera la realidad:
–¿Quién dio su voto, lo hizo para seguir sin drenaje, sin agua potable, con sus vidas en peligro en zonas de riesgo?
Pasaron las elecciones.
Ya pasó un mes.
Y nadie ha regresado con esas vidas marginadas, olvidadas.
–¿Votaron para seguir ahí en medio del abandono, la corrupción, la impunidad, ha donde finalmente los han dejado quienes hacen política y obtienen el poder?
Esas vidas en peligro y olvidadas, ¿tenían alguna oportunidad el 2 de junio?
Ni siquiera tuvieron oportunidad ese 2 de junio esos membretes partidistas que se llaman oposición PAN y PRI, ajenos en la actualidad a la realidad y al compromiso de justicia social y reubicación, incluso desde sus propios tiempos de poder.
En el 2021, el PAN y el PRI a lo turbio del registro de votos le llamaron “inconsistencias”, pero no se atrevieron ir ante la instancia ministerial correspondiente para investigar o aclarar los hechos.
En este regreso al periodismo hace menos de dos meses, cuestionaba en Tecla 7/6 que los dirigentes y candidatos de oposición en el 2024 eran los mismos que en el 2021:
¿Harían lo mismo?
El resultado ya se sabe.
–¿En dónde estuvo la oposición, PAN y PRI, durante tres años en Los Cabos, en Baja California Sur, del 2021 al 2024?
–¿Estuvieron con los olvidados?
–¿Ganaron las calles e hicieron suyo el Congreso sudcaliforniano por los olvidados que son miles en Los Cabos?
–¿En dónde tronó la voz que ganó la calle y se placeó con grandes movilizaciones por los olvidados de Los Cabos?
El poder político nunca ha estado con los olvidados.
Si lo estuviera habría mas hogares con drenaje, con agua potable y habría menos familias en zonas de riesgo.
Todo está peor.
Está pero cada mes.
Está peor cada año.
Está peor cada trienio.
Está peor cada sexenio.
Esos olvidados, sin embargo tuvieron su voto.
Ese voto tuvo un destino. Como el mismo destino brutal de ser los olvidados.
Por Los Cabos pasó lo de Solidaridad de Salinas de Gortari, con todo y su “Que hable México. Y vaya aquel slogan de Zedillo, Bienestar para la familia. El de Peña Nieto, Mi compromiso es contigo y con México. El de Calderón, Para que vivamos mejor. Y sí, el de Fox, México Ya, el cambio que a ti te conviene. Hasta llegar al de López Obrador: la Cuarta Transformación.
Pasaron los sexenios.
Pasó el slogan político.
Las palabras se las llevó el viento para los olvidados.
Ni habló México, ni las familias referidas tuvieron bienestar, ni tuvieron el compromiso presidencial, ni han vivido mejor, no hubo ningún cambio que les conviniera. Y tampoco llegó la transformación para hacer de esas zonas de riesgo, zonas de certeza y buena vida.
La constitución que dice de viviendas seguras, una mentira para los olvidados.
Miles de olvidados en Los Cabos sin oposición PAN y PRI y sin el partido en el poder Morena.
Seguirán ahí. Y cada vez son más.
Lastima la pregunta de la realidad y el voto.
¡Maldita realidad!
¡Maldito olvido!
Suerte echada desde antes de las elecciones.
Destino marcado después de las elecciones.
Después de las elecciones los olvidados siguen sin drenaje, sin agua potable, en zonas de riesgo.
Ya estaban ahí antes.
Los políticos de la “oposición” y del partido en el poder, no están ahí, en esas zonas de riesgo. Están ya metidos en el 2027.
Que agravio.
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